lunes, 24 de julio de 2023

EMBALSE DEL EBRO

"Cantabria Infinita", "Castilla y León es Vida", dos eslogan que definen a la perfección el precioso itinerario que comparten estas dos Comunidades dispuestas a mostrar el inmenso atractivo que posee su paisaje y la maravillosa arquitectura rural enmarcada en los pueblos que le rodean. Es día 14 de julio de 2023, comenzamos la aventura.

Las primeras "pedaladas" surgen junto a la Iglesia de San Cipriano en la localidad de Bolmir, 
mostrando su ambicioso desparpajo románico del siglo XII y en la que aprovechamos para abrir y emprender el siguiente derrotero.

Tras las caricias y el deseo de un buen viaje por parte de estos simpáticos equinos, bajamos
en busca de un jovencísimo Ebro recién parido y alumbrado en el bonito paraje de Fontibre.
La localidad de Requejo nos sorprende con la vitalidad de sus murales que marcan el camino
de subida hasta los aledaños de la Iglesia Parroquial de San Pedro y a su Museo Etnográfico.
Las riberas naturales del Embalse del Ebro incoan la tímida y humilde exhibición de un lugar 
que irá creciendo en atractivo y preciosidad a lo largo y ancho de este excepcional recorrido.
Alcanzamos las primeras viviendas del pueblo de Orzales, invitándonos de forma genuina a 
la búsqueda de su restaurado molino y a practicar un juego de habilidad para llegar hasta el
solitario rincón donde se erigen los gruesos contrafuertes del templo en honor a San Román.
El viejo puente entre Orzales y la península de La Lastra nos hace sentir el caluroso soplo de
una brisa que cabalga y galopa por todos y cada uno de los magníficos rincones del pantano.
La potente cabaña ganadera de la zona se despliega entre ricos y apetitosos pastos cuando
nos vamos acercando hasta la pequeña aldea de Monegro, luciendo su rústico aspecto para
dejar entrever y otear la estupenda situación de la Ermita de Nuestra Señora de las Nieves.
Nos desviamos un momento entre las casonas solariegas de las poblaciones de Villasuso y
Bustamante, encontrando el altozano donde se localiza la Iglesia dedicada a la Santa Lucía.
La intensa y puntillosa floración veraniega nos enamora con su enorme catálogo de colores,
inundando con sus matices y tonalidades los campos circundantes y contiguos a la poderosa
Torre del Merino y a la inmediata Ermita de San Pablo, con aspectos y raigambre románicas.
El amplio lapso de tiempo nos traslada entre los aromas del heno recién cortado, sintiendo la
cercanía y la presencia de la Iglesia de Santa Águeda en el oculto caserío de Quintanamanil.
En un abrir y cerrar de ojos volvemos a sentir la fuerza del paisaje y a percibir esa pendiente
que nos va a encaramar en un espectacular balcón con horizontes privilegiados del pantano.
A nuestra izquierda se abre el brazo del embalse que sube hasta la localidad de Lanchares y
a la derecha empieza a destaparse la majestuosa solemnidad de este maravilloso y soberbio
espacio que riega los corpulentos y robustos muros de la Iglesia de San Andrés, así como las
regias y soberanas piedras de mampostería de la Ermita Virgen del Humano en La Población.
Con el viento y la brisa a favor, seguimos a lomos de nuestra BTT por un luminoso escenario
que nos traslada hasta las hermosas casas montañesas del pueblo de Corconte, cuya Iglesia
de Nuestra Señora de las Angustias marca el límite fronterizo de Cantabria y Castilla y León.
La provincia de Burgos efectúa su caluroso saludo con un mar de praderías y pastizales que
alcanzan la serena lámina de agua del embalse, aterrizando un poco mas adelante sobre las
puertas de la antigüa "Casa de Aguas", en la actualidad centro termal y Gran Hotel Balneario
de Corconte que ofrece sus instalaciones para servicios de belleza, masaje, bienestar y spa.
Aunque los niveles del embalse languidecen por la sequía, los prados y la montaña conspiran
para ser, cada uno, el mas bello y luminoso entre el silencio estimulante que transita el lugar.
La carretera N-623 cruza la diseminada localidad de Virtus entre una aislada arquitectura que
se embellece con un notable catálogo de flores y plantas y creando postales de gran belleza.
La zona de El Mijal constituye el punto mas oriental de todo el pantano y se extiende hasta el
pequeño apeadero de Cabañas de Virtus, donde la línea ferroviaria Bilbao-León se incorpora 
a nuestro trazado para seguirnos por las localidades de Arija, Llano y Rozas de Valdearroyo.
El inquieto "braceo" de los gigantes eólicos del Parque de Montejo de Bricia nos informa de 
un esfuerzo y sacrificio adicional para vencer la acción del viento en una zona de turberas y
manantiales, pudiendo disfrutar del libertario albedrío de estos recios y robustos asturcones.
Continuamos entre la delicada euforia que nos infunde un paisaje que obliga a ascender a la
localidad de Herbosa, saludando a la estilizada torre de la Iglesia de Santiago y abordando
una visita por su precioso entramado urbano con grandes casonas perfectamente adornadas.
Mi compañera de fatigas se toma un descanso para saborear las vistas y los aromas de los
prados y pastos que se arremolinan a la vera del río Nava, nuestro fiel conductor para llegar
hasta el magnífico lavadero de la localidad de San Vicente de Villamezán y en la que brilla la
iglesia ermita del mismo nombre, una joya del siglo XIII y un preciado tesoro del románico.
Seguimos la ruta entre esmeradas y cuidadas construcciones que van al encuentro de una
nueva parada en la estación y apeadero del municipio de Arija, tomando la kilométrica Calle 
de la Gran Vía para instalarnos en el entorno paradisiaco que desprenden todas sus playas.
Sin salir de la provincia de Burgos vamos a poder disfrutar de un maravilloso arenal de aguas
cristalinas batido por la suavidad de la brisa capaz de impactar e impresionar todos nuestros
sentidos y donde el baño se convierte en una grata experiencia en medio de una naturaleza salvaje.
Este hermoso mar interior posee la destreza y la habilidad para seguir creando encantadores
y elegantes horizontes, además de sentirlos practicando varios deportes naúticos como son
la vela, las piraguas, el kitesurf, que permanecerán vigentes en la memoria del excursionista.
Por último, nos asomamos al moderno embarcadero que hace funciones de mirador sobre el
Puente del Tren de La Robla, un esbelto y estilizado viaducto enclavado en el bello estuario
y desembocadura del río Nava, conformando una espectacular postal en el municipio Arijeño.
La Iglesia Parroquial en honor de la Asunción de Nuestra Señora nos encauza y encamina a
las ruinas del Colegio Argüeso, una preceptoría en la docencia y estudio del idioma del latín en Arija.
La carretera BU-642 se convierte en CA-730, al igual que la agradable arquitectura burgalesa
se transforma en estupendas construcciones cántabras en la sugestiva población de Bimón,
cuya Iglesia Parroquial dedicada a san Julián es el edificio mas emblemático de la población.
Nuevas panorámicas y refrescantes vistas acuden a nosotros cuando empezamos a circular
entre los verdosos tonos que armonizan las numerosas dehesas situadas en los arrabales del
pueblo del Llano, en la que su Iglesia de Santa Juliana iza y enarbola un gran tejo milenario.
Disfrutamos de la maravillosa y encantadora desembocadura del Río de Ballurbio, a los pies
del mágico lugar en el que se instala la coqueta Ermita de la Virgen del Avellanal, para seguir
las fragancias y los efluvios de una costa atestada de pequeñas florecillas que adornan todas
las sendas y caminos que bajan hasta las contornos de la Ermita de San Miguel de Renedo.
Mantenemos una motivada atención para vislumbrar el prodigioso entorno que se abre para 
llegar hasta la iglesia de Villanueva de la Rozas, conocida como Catedral de los Peces, que
tuvo que ver como sus casas y sus campos fueron anegados por las aguas del Embalse del Ebro.
Sus maravillosas vistas dibujan escenarios que rozan lo idílico, engendrando una tranquila
sensación de laxitud y relajamiento impulsada por los destacados tonos de las malvas reales.
La Iglesia de San Pedro Apóstol de las Rozas de Valdearroyo nos expulsa hacia la enorme y
desmesurada lámina de agua contenida y represada por los estudios del ingeniero Manuel
Lorenzo Pardo, constructor de la presa por donde el río Ebro busca su salida y escapatoria.
Subimos a visitar la Iglesia de San Juan en la localidad de Arroyo, un edificio que se mimetiza
a la perfección entre las enormes casonas solariegas vestidas con densas y lozanas hiedras.
El aire puro sigue bailando en nuestros rostros y una vez atravesado el espeso bosque de La 
Barguca, bajamos a quitarnos el polvo del camino a las riberas herbosas de Horma de Ebro,
custodiados y salvaguardados por la belleza de su puente de catorce vanos construido en 1950.
Cruzamos extraordinarios remansos convertidos en meandros en los que el ganado vacuno 
y caballar dejan notas de un gran sosiego e imperturbabilidad en un paraje casi inalterable.
Solamente nos queda ascender hasta la altanera Ermita de Santa Bárbara en Villafría, donde
se refugia un pequeño rebaño de ovejas que sestean con total placidez y serenidad mientras
divisan en la lejanía el sinuoso y serpenteante cauce fluvial del río Ebro y se atisba el rumor
y el bullicio de la denominada Puerta de Castilla en Cantabria, Reinosa, localidad donde finaliza nuestra aventura.
Saludos de "EL BICIERRANTE" a tod@s caminantes y BTTeros.                                                      Toda la ruta en fotos: EMBALSE DEL EBRO

2 comentarios:

  1. Hola,de dónde es el puente ten grande?

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    1. Saludos Rosina, el puente cruza desde la localidad de Orzales hasta la Península de La Lastra. Saludos, un beso.

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